En términos generales, para cortar el césped se utilizan cortadoras de césped, tractores y desbrozadoras de ruedas, con la diferencia sustancial de su finalidad. Los cortacéspedes y tractores están destinados al mantenimiento del césped , es decir, a un corte limpio, sin desgarros, ajustado a una determinada altura para que el césped tenga buen aspecto y se mantenga sano en las distintas estaciones, en función de la temperatura, horas de luz, etc. Los desbrozadores de ruedas, en cambio, sirven para limpiar la hierba más dura y otra vegetación , un poco como las trituradoras o desbrozadoras de martillos, con las que están emparentados.
Esta clara división es imprecisa porque hay máquinas con funciones intermedias. De hecho, los cortacésped más potentes tienen características en común con las desbrozadoras de ruedas, mientras que algunos tractores tienen funciones similares a la familia de cortacésped. En este artículo aclararemos las diferencias y peculiaridades de cortacésped, tractores y desbrozadoras de ruedas.
Vegetación y zona de trabajo.
El corazón de estas máquinas es el sistema de corte: en cortacéspedes, tractores y desbrozadoras de ruedas consta de un plato en cuyo interior giran una o más cuchillas, paralelas al suelo . En el caso de cortacésped y tractores, mientras las cuchillas están cortando, el césped es expulsado mediante descarga trasera o lateral. Desde la salida trasera, los restos acaban normalmente a un recogedor de césped (imprescindible si se quiere tener un césped limpio) o al suelo. Por la descarga lateral, sin embargo, se acumula en el suelo: se puede utilizar el corte con descarga lateral (o con descarga trasera sin recogida) para cortar superficies sin exigencias o en las que no conviene recoger la hierba, por ejemplo: un césped descuidado, en el campo o entre las hileras de un viñedo o huerto.
Algunos cortacéspedes y tractores ofrecen, de serie o en opción, múltiples funciones de gestión de corte y recorte: corte y expulsión (trasera, con y sin recogida, y/o lateral) y corte mulching . Con este último la hierba prácticamente se pulveriza y se deposita en el suelo, que se enriquece así con sustancia orgánica. Un poco como la descarga de césped, el corte con mantillo es adecuado para superficies muy grandes donde recoger y eliminar el césped es demasiado laborioso.Si para cortar hierba y malas hierbas se utilizan cortadoras de césped y tractores, lo que marca la diferencia es el ancho de corte, es decir, el tamaño del área de corte y el tiempo necesario para completar el trabajo. Con anchos de corte que van desde los 33 a los 53 cm, podrás utilizar el cortacésped hasta 300-2.600 m2 , dependiendo del combustible y la potencia del motor (tomamos como referencia los cortacéspedes Oleo-Mac ). Mientras que los tractores de jardín son indispensables en superficies grandes (para los tractores Oleo-Mac, según el tipo y el modelo, hasta 4.000-10.000 m2) gracias a sus anchos de corte de 72 a 125 cm.
Esta diferencia se refleja también en el modo de manejar las máquinas: los tractores se conducen sentado a bordo, mientras que los cortacéspedes hay que dirigirlos con la mano y, si no tienen ruedas motrices, hay que empujarlos. Gracias a la tracción, sin embargo, con los cortacéspedes autopropulsados puedes afrontar incluso terrenos extensos y cuesta arriba sin demasiado esfuerzo.
Incluso las desbrozadoras de ruedas, compactas y fáciles de manejar, avanzan gracias a la tracción -con ruedas motrices u orugas, según el modelo- con la que superan pendientes y terrenos irregulares. En el caso de los cortacésped Oleo-Mac, las cuchillas que giran en el plato de corte son cuchillas mulching reforzadas , cuya tarea es cortar y triturar hierba, malas hierbas y otra vegetación difícil de hasta 1,5 cm. Se trata de un montaje completamente diferente a las desbrozadoras de ruedas , formado por un eje horizontal que hace girar unas cuchillas , con las que atacas hierba, malas hierbas, arbustos, zarzas, juncos, matorrales, podas y restos de cultivos. Ambos no implican la recogida de vegetación cortada, que permanece en el lugar para descomponerse o se entierra (como sarmientos y cultivos de abono verde).
Los rider y los tractores de jardín son tipos particulares. Normalmente la placa portacuchillas de los tractores es ventral, mientras que los rider tienen una placa frontal y son compactos y ágiles, ideales para sortear árboles, parterres, cenadores, etc. En espacios reducidos o plagados de obstáculos, el volumen de los tractores con anchuras de corte más generosas se convierte en un impedimento, en beneficio de los modelos más pequeños o mini -como los rider- y, por supuesto, de los cortacéspedes y las desbrozadoras de ruedas.
Los modelos Apache son básicamente vehículos todoterreno, incluso con tracción a las cuatro ruedas, destinados a terrenos más "extremos": terrenos baldíos, vegetación densa, maleza en terrenos accidentados y muy inclinados (hasta un 40% de pendiente).
Por el tipo de vegetación y la dificultad del trabajo al que están destinados, las desbrozadoras de ruedas son similares a los modelos de cortacésped más potentes, frente a los cuales trabajan de forma más tosca y cubren superficies más grandes (hasta 2.000-5.000 m2) con una pendiente máxima del 20%. Por otro lado, los tractores de jardín son comparables a las desbrozadoras de ruedas, pero siguen siendo imbatibles en términos de superficie tratada.
Potencia y facilidad de uso
El aparato de corte de cortadoras de césped, tractores y desbrozadoras de ruedas se mueve mediante un motor . En el caso de los cortacéspedes puede ser eléctrico, de batería o de gasolina, que suele ser la categoría de motor más potente. Los tractores de jardín suelen tener un motor de gasolina, así como las desbrozadoras de ruedas funcionan con motores de combustión interna.
En cuanto a potencia y especificaciones del motor, la potencia de estas máquinas va de la mano con su rendimiento. Esto no quiere decir que cuanto más potentes sean mejor, sino que la potencia debe ser proporcional a la carga de trabajo, es decir, a la amplitud del terreno a mantener o limpiar, a sus características (si es llano, empinado o lleno de baches) y el tipo de vegetación a tratar (desde césped hasta vegetación más resistente). La potencia del motor se correlaciona luego con otras especificaciones técnicas de la máquina - que deben sopesarse en función de sus necesidades - y, en última instancia, con el precio: dimensiones y peso total, ancho de corte, número de cuchillas, radio de giro, sistema de avance, velocidad máxima, tipos de corte disponibles, capacidad del recogedor de césped (si lo hubiera).
Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir un cortacésped, tractor o desbrozadora de ruedas es la facilidad de uso. Además del modo de avance , del que hablamos antes, la comodidad cobra varios significados:
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Ergonomía: se refiere a todos los aspectos que requieren esfuerzo físico o obligan a adoptar posiciones incómodas, como arrancar el motor, ajustar el manillar en el caso de cortacésped y trituradoras, ajustar la altura de corte, el sistema de transmisión, la posición de los mandos.
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Autonomía de trabajo: tiene que ver principalmente con el acceso a la electricidad (para maquinaria eléctrica y de batería) y con el repostaje (para máquinas con motor de combustión interna), pero también con la capacidad de la bolsa recolectora de césped de los cortacéspedes y tractores que la suministran. .
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Versatilidad: gracias a los accesorios especiales también puedes utilizar los tractores para remolcar, apisonar el suelo con el rodillo, etc.
El mantenimiento es la base para el buen funcionamiento de todas las máquinas de jardinería, incluidos cortacésped, tractores y desbrozadoras de ruedas.